El abogado de Manos Limpias, Ángel Francisco Gómez, ha explicado que, «aparentemente», en la Diputación de Ourense «no se cumplían las normas en el procedimiento de contratación» según las ordenanzas dictadas y aprobadas por el presidente de la entidad provincial, José Luis Baltar, en 2004. «Curiosamente», ha dicho, «incumplía sus propias normas».
En declaraciones a los medios, consideró, además, que las declaraciones de tres trabajadores y el secretario de la Diputación, Francisco Cacharro, que se han producido este lunes ratificaron las que hubo la semana pasada, y «no van más allá» de lo recogido en la querella.
Por su parte, el abogado del PSOE, José Arcos, ha incidido en este misma circunstancia, y ha manifestado que las declaraciones de este lunes «siguen la misma línea», pues continúan «sin justificar» por qué se contrata a personas «sin que ellas soliciten» participar en la selección de personal.
Según Arcos, algunos de las personas «insultaron al entendimiento jurídico lógico más básico», sin dejar de reconocer «la infracción», declarando «medias verdades» y no declarando «otras que saben perfectamente», agregó.
ALGUNOS TESTIGOS SIGUEN EN LA DIPUTACIÓN
De los tres trabajadores que declararon este lunes durante una media hora cada uno, algunos siguen trabajando en la Diputación, según explicó Arcos, y algunos reconocieron su vinculación política con la presidencia de la Diputación.
«En mi percepción, fue clara la actitud de decir medias verdades con ánima de perjudicar lo menos posible al expresidente Baltar» pero, en su opinión, la documentación presentada «es mucha y con gran peso» como para dejar claros los indicios, pero «lo deberá valorar el juez», remató.
Las declaraciones de esta tarde duraron más de cuatro horas de las que más de dos correspondieron a las del secretario de la Diputación, Francisco Cacharro Gosende, el informe que él emitió el día 18 de mayo sobre los 104 contratos ahora denunciados, por petición del PSOE de la Diputación e incidencias del expediente de contratación.
Así, dijo no conocer los contratos hasta que tuvo que hacer el informe sobre ellos, y que tampoco informó sobre su legalidad porque a él no le corresponde hacerlo, y reiteró lo que dijo antes de entrar en relación a que a nivel administrativo «se incumplió el trámite que contempla la ordenanza de contratación».
EL SECRETARIO NO QUIERE HABLAR DE «ENCHUFISMO»
Se refirió a la palabra «enchufismo» en relación a la Diputación de Ourense, en respuesta a una pregunta, para explicar que esa palabra no le gusta nada y la calificó de «tópico, lugar común y creación periodística».
En ese sentido, ha relatado que a él mismo le atribuyeron ser un «enchufado» cuando entró en la Diputación «por ser hijo de quién soy» y recordó que llegó a su cargo como secretario tras un concurso público que fue criticado por la prensa.
También se refirió a los contratos realizados por el actual presidente de la Diputación, José Manuel Baltar, de los que dijo no tener constancia de que haya irregularidades. «No los revisé y no puedo certificarlo pues para hacerlo tendría que pasar horas revisándolos pero no me consta», ha señalado.
Momentos previos a entrar en el juzgado, Cacharro Gosende reconoció, antes de que se le preguntara ante el juez, que los 104 contratos que centran la querella de la Fiscalía contra el expresidente de la Diputación José Luis Baltar «incumplieron el trámite previsto por la ordenanza, en relación a la publicacion del concurso».