El líder del partido opositor ecuatoguineano Ciudadanos por la Innovación, Gabriel Nsé Obiang Obono, denunció hoy que uno de los militantes retenidos sin agua ni comida en la sede del partido desde el pasado jueves está al borde de la muerte, en declaraciones a Efe.
En una conversación telefónica con Efe desde la sede de la formación en la capital, Malabo, Nsé Obiang indicó que el joven «ya no se mueve» y que podría fallecer en las próximas horas, a lo que añadió que la falta de medicamentos ha provocado el empeoramiento del estado de salud de otra militante del partido que está retenida.
«Estamos pidiendo socorro. Hemos pedido ayuda a las organizaciones humanitarias, pero nadie acude. Necesitamos asistencia sanitaria, de aquí a unas horas podemos tener personas muertas», lamentó el líder opositor.
Nsé Obiang reveló un aumento anoche de la presencia militar que asedia la sede del partido, y denunció que el plan era aprovechar los festejos de Nochevieja para asaltar el edificio y asesinarlo a él, algo que se evitó, según su relato, por la intervención a última hora de diplomáticos de España, Francia y Estados Unidos.
«Hablé con ellos y les avisé de la situación. La gente me ha informado de que les vieron hablando con los militares. Si se ha evitado ha sido gracias a su intervención. De no estar presentes, se habría producido lo peor», explicó el número uno del único partido opositor con representación parlamentaria en el país.
El político indicó que ha mantenido contacto con estas tres delegaciones, así como con la portuguesa, para pedirles que faciliten las negociaciones con el Gobierno dirigido desde 1979 por Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, que lo acusa de orquestar un golpe de Estado fallido, aunque Nsé Obiang asegura desconocer estos hechos.
«La situación no tiene comparación. Pido a la comunidad internacional que reaccione y que no deje al presidente Obiang Nguema hacer lo que le dé la gana con sus ciudadanos», reclamó Nsé Obiang.
El líder opositor reiteró que los militantes detenidos que han sido trasladados a prisión están «muy maltratados», y confirmó que su hija se encuentra inconsciente en el hospital después de que los militares que vigilan la sede del partido le hayan impedido acceder al edificio esta mañana.
Horas antes de esta conversación, el abogado Fabián Nsué explicó a Efe que ayer intentó reunirse con Nsé Obiang en la sede del partido para ofrecerle asistencia jurídica y que los gendarmes que mantienen el edificio en «un estado de sitio no declarado» le detuvieron durante unas tres horas.
En la sede de Malabo se encuentran unos 45 militantes y en la de Bata, segunda ciudad del país, otros 50, que según el relato de Nsé Obiang habrían acudido a la sede del partido porque estaban siendo asaltados y detenidos por la Policía en sus casas.
El partido también denunció la detención de centenares de militantes en diferentes partes del país, que habrían sido torturados por las fuerzas de seguridad.
Entre los detenidos figuran los dos únicos cargos electos de la oposición en las legislativas del pasado noviembre: el diputado Jesús Mitogo Oyono y la concejal del ayuntamiento de Malabo Elvira Behebá Sité, de los que Nsé Obiang aseguró que asimismo están sufriendo torturas.
En los comicios legislativos, la oposición solo consiguió un escaño de los 100 de la Cámara de Diputados (y ninguno en el Senado), mientras que los 99 restantes fueron para el Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE) del jefe de Estado.