Una cámara de seguridad y las contradicciones de la madre sobre los hechos han llevado a los investigadores a considerar a Rosario Porto como principal sospechosa del asesinato de su hija Asunta, de 12 años, cuyo cuerpo se encontró por la noche en una zona forestal del municipio de Teo, a unos 10 kilómetros de Santiago de Compostela.
La madre, una conocida abogada de 44 años de Santiago, fue detenida el martes por su presunta relación con el homicidio de la niña, de origen chino que fue adoptada con un año. El padre, Alfonso Basterra, ha sido imputado pero ha quedado en libertad con cargos.
Las contradicciones de Rosario condujeron a su detención. La letrada dijo cuando presentó la denuncia que la pequeña había desaparecido entre las 19:00 y las 21:00 horas. Pero una cámara de seguridad grabó a la madre en las inmediaciones del piso, cuando la pequeña supuestamente había desaparecido.
Las imágenes fueron grabadas por la cámara de un negocio cercano al inmueble situado en la calle Doctor Teixeiro, donde Asunta Basterra vivía con su madre de adopción.
Otro hecho que hizo sospechar a los investigadores es el relato de la madre cuando interpuso la denuncia. Según manifestó, a mediados de julio, sobre las 2:30 horas sorprendió a un hombre en la habitación de su hija que intentaba hacerle daño. Según el relato de sospechosa, el hombre intentó asfixiar a su hija y cuando el agresor notó su presencia, huyó. «Sobre las 2.30 de la madrugada escuché a mi hija dar gritos y me levanté de la cama. Comprobé que había un varón, de 1,60 de estatura, complexión fuerte, vestido de ropa oscura, portando guantes de látex y huyendo por el pasillo», aseguró Rosario Porto. El supuesto agresor podría haber entrado con las llaves que ella se dejó puestas por descuido en la puerta de entrada por aquel entonces. Sin embargo, Rosario no presentó ninguna denuncia, porque no quería generar ningún tipo de trauma a la niña.
Otro indicio contra la madre es que los investigadores encontraron en su finca, cerca del lugar donde se encontró el cadáver de la pequeña, unas cuerdas similares a las que se hallaron en el lugar donde fue abandonado el cuerpo.
Esa vivienda se encuentra en Montouto (Teo), a unos tres kilómetros de la pista forestal donde se encontró el cadáver. Según cuenta El País, la madre admitió cuando interpuso la denuncia que estuvo en esa finca para coger unos trajes de baño, porque la familia tenía previsto ir a la playa el domingo.
Porto adoptó a Asunta, de origen chino, cuando la pequeña tenía un año, y lo hizo junto a su entonces marido, el periodista Alfonso Basterra Camporro.
En la jornada de este miércoles está previsto que tanto Alfonso Balterra como Rosario Porto acompañen a las fuerzas de seguridad hasta la finca de Montouto, propiedad de la madre, para seguir el registro.
La detención de Rosario ha causado una enorme sorpresa en su entorno. Según cuenta La Voz de Galicia, la madre estaba muy implicada en la educación de su hija. No obstante, su vida cambió radicalmente hace un par de años, cuando fallecieron sus padres y ella dejó el trabajo. Poco después, se separó de su marido. En su círculo cercano no dan crédito a lo que ha pasado, ni a la acusación que pesa sobre ella.