Los perros no solo suelen estar atentos a la atención que les prestan los humanos, sino que su repertorio de expresiones faciales es mayor cuando una persona les está mirando, según un estudio de la Universidad de Portsmouth (Reino Unido) que publica Scientific Reports.
Expertos del Centro de cognición canina de la Universidad de Portsmouth han encontrado «claras evidencias de que los perros mueven su cara como respuesta directa a la atención humana» mientras que no responden así frente a una comida sabrosa. Esta diferencia sugiere que el perro adopta expresiones faciales diversas «para comunicarse y no solo porque esté emocionado», según un comunicado de la universidad.
Y si hay una expresión que predomina sobre el resto es la de alzar la cejas, lo que hace los ojos más grandes, un gesto también llamado ‘ojos de cachorro’. Los humanos «son especialmente sensible a esa expresión» de ojos de cachorro, que puede asociarse a la tristeza, con lo que consiguen generar una mayor empatía o recordar a los de un niño. Es su particular forma de manipular a los humanos.
En el estudio se emplearon 24 perros domésticos de varias razas con edades de entre uno y doce años. Todos ellos fueron atados con una correa a un metro de una persona y se grabaron sus caras cuando la persona les miraba o si estaba distraída, entre otras situaciones. Con un sistema de análisis de expresión facial de perros se analizaron los movimientos de los músculos de la cara de los animales.
La mayoría de los mamíferos realizan expresiones faciales, que se consideran una parte importante de su repertorio conductual, aunque durante largo tiempo se ha asumido que son «involuntarias y dependen del estado emocional del animal antes que respuestas flexibles ante una audiencia».
Por estudios previos ya se sabía que los canes domésticos se fijan en lo atento que está una persona (los animales robaban más comida si el humano tenía los ojos cerrados o estaba de espaldas). Pero este nuevo estudio «da un paso en lo que entendemos por cognición canina. Ahora sabemos que los perros producen más expresiones faciales cuando los humanos les están haciendo caso», revela la investigación.