UGT ha lamentado que la situación y los datos reales en España sean «difíciles de conocer» debido a que es «relativamente reciente la inclusión en el Código Penal del delito de trata de seres humanos». «Aunque se debe, sobre todo, a la invisibilidad y vulnerabilidad de las víctimas, las dificultades y repercusiones que para ellas supone denunciar este delito», ha apostillado.
De la misma forma, ha denunciado «la tolerancia social y la normalidad con la que la sociedad convive con una conducta delictiva que tiene como finalidad la explotación sexual o laboral».
En este sentido, UGT ha recordado que «una víctima de trata de seres humanos puede ser cualquier persona, nacional o extranjera, en situación regular o irregular» e insiste en que este comercio de seres humanos «es una de las formas más graves de violación de los derechos humanos».
Por todo ello, también ha señalado que «es preciso un mayor papel de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social en la detección de las víctimas de trata con fines de explotación laboral, con la colaboración de las Organizaciones Sindicales y la elaboración de criterios técnicos por parte de la Inspección que faciliten la detección de víctimas».
Asimismo, ha apostado por «penalizar a la demanda». «Si hay trata de seres humanos es porque hay una demanda dispuesta utilizar los servicios de una víctima de trata, sea en la prostitución, sea en el mercado de trabajo», ha sentenciado.