El Movimiento Reducetariano, compuesto por individuos que se han comprometido a comer menos carne, productos lácteos y huevos, está en auge. Cada vez más gente se vuelca, sin importar el grado o la motivación, en reducir los productos animales de sus dietas. Quizá no pueden eliminarlos por completo, pero se comprometen a reducirlos.
Desde reducetarian.org animan a comer “menos carne y más fruta y vegetales”, para llevar “unas vidas más largas, más saludables y más felices”. Su objetivo es mejorar la salud del ser humano, proteger el medio ambiente y evitar el sufrimiento de los animales de granja a partir de la reducción del consumo de productos de procedencia animal.
Para ellos no es cuestión de “todo a nada”: “Nos alegramos de los pequeños cambios en el comportamiento de las personas que colectivamente tienen como resultado una gran diferencia a nivel mundial”.
Eso sí, desde la Fundación Reducetariana reconocen que “el reducetarianismo no es nuevo -nosotros sólo le hemos dado un nombre. Muchos gobiernos, instituciones de salud públicas, y algunos de los más grandes distritos escolares han alentado y promulgado campañas de reducción de consumo de carne”.
¿Qué es el reducetarianismo?
El reducetarianismo es la práctica de comer menos productos de origen animal. Resulta atractivo porque no todo el mundo es capaz o no quiere realizar una dieta estrictamente vegana o vegetariana.
¿Por qué reducir?
Consumir menos productos de origen animal disminuye el riesgo de padecer enfermedades del corazón y algunos tipos de cáncer, reduce las emisiones de carbono y el sufrimiento de los animales de granja, incluso reduce la crisis mundial de alimentos y agua.
¿En qué se diferencian los reducetarianos de los flexitarianos?
Mientras los flexitarianos consumen primordialmente verduras y vegetales y ocasionalmente consumen carne, los reducetarianos reducen con atención y de forma gradual su consumo de carne respecto a sus propias dietas.
¿El reducetarianismo promueve el vegetarianismo o el veganismo?
El reducetarianismo puede realmente conseguir que algunos individuos reduzcan su consumo de carne a cero. Otros simplemente reducen la cantidad que comen.