«La iniciativa atiende al compromiso de Roche por mejorar las condiciones de vida de las personas más desfavorecidas y qué mejor forma de hacerlo que ayudando a niños sin apenas recursos a salir adelante», ha declarado el director general de Roche, Severin Schwan.
De esta manera, gracias a este proyecto, que cumple ya su novena edición, se han equipado cinco orfanatos, se ha construido escuelas y se ha enseñado a profesores en Malawi. Además, cada año, suelen viajar al país africano algunos participantes de esta marcha para conocer »in situ» en qué situación viven estos niños y cómo se materializan los programas de ayuda en su día a día.
Los fondos que se han recaudado con esta marcha celebrada en España, irán destinados al proyecto global que la compañía desempeña con los niños huérfanos de Malawi y, la otra, a la Fundación de Oncología Infantil Enriqueta Villavecchia, cuya misión es la de atender las necesidades de jóvenes enfermos de cáncer.