El delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, ha destacado hoy la «buena colaboración» que existe entre las fuerzas de seguridad marroquíes y españolas en la lucha contra un «problema común» como la inmigración clandestina.
En una entrevista con RNE, El Barkani ha dicho que España y Marruecos intentan contener la inmigración irregular, un objetivo que no se puede conseguir al ciento por ciento porque «no todo vale» para conseguirlo, dadas las «limitaciones» y la necesidad de utilizar una «fuerza proporcional».
«Si no hubiese esas buenas relaciones, creo que estaríamos hablando de unas cifras que podríamos multiplicar por 5, por 6, por 7 o por 10», ha dicho El Barkani.
Según sus cálculos, en el monte Gurugú podría haber alrededor de 1.500 inmigrantes y en las inmediaciones de Melilla entre 8.000 y 10.000, cifras que son «absolutamente compatibles» con las que ofreció el ministro del Interior respecto a que en Marruecos esperan 40.000 inmigrantes y en Mauritania otros 40.000.
Ha explicado que los trabajos para reforzar el perímetro fronterizo entre Melilla y Marruecos con las medidas anunciadas por el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, fundamentalmente la instalación de 15.000 metros de malla antitrepa en las dos vallas, terminarán a finales del verano.