El presidente de la República de Italia, Sergio Mattarella, pidió hoy a los partidos políticos que reflexionen en los próximos días, tras la falta de acuerdo para impulsar un Gobierno, y anunció que volverá a reunirse con ellos la próxima semana para valorar si el panorama ha cambiado.
Mattarella concluyó hoy las consultas de dos días y tras reunirse con los distintos grupos políticos compareció ante los medios en la sede de la jefatura del Estado para comunicar que ningún candidato está aún en condiciones de intentar formar un Ejecutivo que después sea respaldado por el Parlamento.
Ese era el objetivo de las conversaciones, dijo, pero por el momento «esta condición aún no se ha dado».
Por ello, anunció que permitirá «unos días de reflexión» a las distintas formaciones, algo que según confirmó le han pedido varios exponentes durante las reuniones.
Esta pausa «será útil también para mí, para reflexionar sobre las consideraciones que me han transmitido los partidos. Y será útil también seguramente para ellos, para que puedan valorar responsablemente la situación (…) y las posibles soluciones», comentó.
Mattarella se volverá a reunir con los partidos ya la próxima semana, aunque no fijó fecha por el momento.
En esta segunda ronda de consultas comprobará «si ha madurado alguna posibilidad (de acuerdo de Gobierno) que aún no existe».
Las elecciones generales del 4 de marzo en Italia dibujaron un panorama político muy dividido, en el que quedó vencedora la coalición de derechas formada por la Liga Norte, Forza Italia y Hermanos de Italia, con el 37 % de los apoyos.
En segundo lugar -aunque en solitario- se situó el Movimiento Cinco Estrellas (M5S), con el 32,7 % de las papeletas, y después el Partido Demócrata (PD, centroizquierda), que tras gobernar los últimos cinco años solo registró un 18,8 % de los votos.
Mattarella recordó que esta es la situación actual del país y advirtió de que las negociaciones «son indispensables», ya que «ningún partido dispone de los apoyos suficientes para formar un Gobierno y sostenerlo».
Las consultas arrancaron el miércoles, cuando Mattarella recibió a los presidentes de la Cámara de los Diputados y del Senado, y a los grupos parlamentarios menores.
Hoy fue el turno de los cuatro partidos que obtuvieron mayores apoyos en los comicios: el PD, Forza Italia, la Liga y el M5S.
El candidato a primer ministro por el M5S, Luigi di Maio, reiteró al presidente de la República lo que ya anunció en los últimos días, que propone un «contrato de Gobierno» o bien con el PD o con la Liga, si bien esta última debe romper la alianza que le une a Forza Italia, de Silvio Berlusconi.
Además, se presentó como primera fuerza del país y consideró como sus interlocutores al PD y a la ultraderechista Liga, por lo que pedirá «inmediatamente» un encuentro con sus respectivos líderes, Maurizio Martina y Matteo Salvini.
Salvini, por su parte, reivindicó un Ejecutivo formado por la coalición de derechas ganadora de las elecciones en Italia y llamó a la responsabilidad al M5S para llegar a acuerdos ante la falta de mayorías.
Admitió que sin la colaboración del M5S no se podrá conseguir una mayoría parlamentaria, por que invitó «a dar un paso al lado» si se quiere liderar el país, porque si no «la única solución será volver a convocar elecciones».
Por su parte, Berlusconi, líder de Forza Italia, socio coaligado de la Liga, consideró fundamental que el próximo Gobierno surja «de la coalición que ha ganado las elecciones, el centroderecha, y del líder del partido más votado» de la alianza, Salvini.
Además, impuso condiciones para las negociaciones: «No estamos dispuestos a un Gobierno hecho a base de pauperismo, justicialismo, populismo y odio, que desencadenaría una espiral recesiva y de impuestos elevados con fracasos en cadena también en el sector bancario», sostuvo.
Y pidió un Ejecutivo «creíble» ante la Unión Europea que, dijo, «no perdonaría populismos».
Finalmente, el PD excluyó alianzas para un futuro Gobierno y reiteró que su lugar la próxima legislatura será la oposición.
«El resultado negativo (en las elecciones) no nos consiente formular hipótesis de Gobierno», valoró el secretario general temporal de la formación tras la dimisión de Matteo Renzi, Maurizio Martina.
Los partidos tendrán ahora unos días para analizar sus posturas y las del resto de fuerzas, y seguir negociando para intentar desbloquear la situación actual.