En declaraciones a los medios tras reunirse en Ljubljana (Eslovenia) con el expresidente de este país, Milan Kucan, Torra ha asegurado que este jueves no hay «nada que celebrar y mucho que denunciar».
Además, el presidente del Ejecutivo catalán ha pedido a la comunidad internacional que «no se quede silenciada» ante la huelga de hambre que hace seis días iniciaron presos soberanistas, y ha defendido que su lucha no solo afecta a los catalanes sino a todos los demócratas del mundo.