Vehículos de la policía catalana circulan subiendo y bajando por la avenida, lo que ha generado carreras de los manifestantes, de los que quedan unos 300 al final de la vía, cerca de la Llotja de Mar, donde se ha celebrado el Consejo de Ministros.
Así, la policía catalana realiza estas maniobras de dispersión tras una mañana de protestas en las que se han vivido momentos de tensión –con al menos 11 detenidos– y también concentraciones pacíficas, con más de 3.000 personas.