En un comunicado, las organizaciones han subrayado que «ciudad de Jerusalén no forma parte, según el Derecho Internacional del Estado de Israel» y que la ONU considera la parte Oriental de la ciudad un territorio palestino ocupado por Israel desde la «Guerra de los 6 días» de Junio de 1967.
Además, recuerdan que el Consejo de Seguridad de la ONU condenó en dos resoluciones (la 476 y 478) la ley israelí de 1980 que consideraba Jerusalén como su «capital eterna e indivisible».
Por eso, consideran la decisión de Trump una «violación del Derecho y la legalidad internacional» y reclaman a los Gobiernos de España y la UE que intervengan para rechazarla «por las consecuencias negativas a la convivencia entre los pueblos y a la Paz mundial» y exigir el cumplimiento de la legalidad internacional.