En un telegrama, el jefe del Ejecutivo ha rogado a Kaboré, en su nombre y en el del pueblo de España, que transmita sus condolencias a los familiares de la treintena de víctimas mortales, así como su deseo de una pronta recuperación para los heridos.
Rajoy también ha querido mostrarle al presidente burkinés el apoyo completo del Gobierno de España en la lucha contra este «azote» en el estado africano y en toda la región del Sahel.