Carles Puigdemont lo confirma: “Si el Tribunal Constitucional me inhabilita, no aceptaré esta decisión”. Estas han sido las palabras del presidente de la Generalitat en una entrevista concedida al diario francés Le Figaro.
«Si el Tribunal Constitucional me inhabilita, como puede hacer, no aceptaré esta decisión. Solo el Parlament me puede suspender» ha declarado Puigdemont confirmando así el choque de legitimidades al que tanto se ha aludido los últimos meses. Esta conversación se enmarca en los continuos ceses y cambios de gobiernos dentro del gobierno catalán de los últimos dos meses.
El reconocimiento de una legitimidad u otra es la clave para el proceso que ha comenzado en Cataluña y que encabeza el gobierno catalán. Aun así, el Ejecutivo de Puigdemont insiste en que solo conciben la opción de votar. “Cataluña quiere votar y Madrid no puede impedirlo” ha añadido Puigdemont.
«Una inmensa mayoría del pueblo catalán quiere votar. Suspendiéndome o expulsándome de mi despacho, Madrid no va a anular esta voluntad. No existe un poder suficientemente fuerte para cerrar el gran colegio electoral que será Cataluña el 1 de octubre».
Desde el Govern insisten en que su política está avalada por los ciudadanos catalanes. «Nuestro compromiso con el pueblo y con el Parlament es claro: debemos resolver nuestras reivindicaciones en las urnas. Ninguna suspensión, ninguna amenaza podrá impedir que los catalanes decidan su futuro de manera democrática», ha advertido.
Para el Partido Popular esta clase de declaraciones no hacen más que complicar la situación. La vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha declarado que “cualquier actuación preparatoria va a tener respuesta”. La número dos del Ejecutivo de Rajoy ha manifestado que «desde que el 14 de febrero de este año el Tribunal Supremo señalara que está prohibido cualquier acto preparatorio del referéndum, todas las instituciones del Estado, el Gobierno, pero también el resto de instituciones, hemos ido paralizando todos y cada uno de los pasos que ha ido dando la Generalitat hacia ese referéndum de carácter ilegal y que tanta división está generando en Cataluña».
Desde el Partido Demócrata Catalán insisten en que inhabilitar al president no traerá las consecuencias que se esperan desde Madrid. «Si el Estado inhabilita al president se encontrará enfrente a la mayoría del pueblo de Catalunya» ha declarado el líder del PDeCat en el Congreso de los Diputados.
El análisis de los resultados
Carles Puigdemont ha admitido que una «participación ridícula equivaldría a perder el referéndum», y ha asegurado que durante la organización de esta consulta el Gobierno catalán y los ayuntamientos mantendrán una neutralidad escrupulosa. Además, ha confirmado que la votación estará sometida a un control de los observadores internacionales.
«El Gobierno catalán no hará campaña en favor de la independencia», ha asegurado al preguntársele por la neutralidad del escrutinio. Sobre las autoridades locales, el president ha confirmado que si los alcaldes se niegan a ceder ciertos espacios, se habilitarán locales para que el referéndum se pueda celebrar.
En caso de que el resultado del referéndum fuera ‘sí’ y ganara la independencia, 48 horas después de que los resultados se hicieran público se explicará que Cataluña «se transforma en un Estado independiente». Además explica que se abrirá un periodo de transición que culminará con unas elecciones constituyentes, la redacción de una Constitución y su ratificación por un referéndum. «Cataluña empezará a actuar como estado independiente, pero no lo será de derecho hasta que esta transición culmine», ha concluido.
El Govern publicita la compra de sobres y papeletas
La Consejería de Gobernación, Administraciones Públicas y Vivienda ha informado este lunes del proceso administrativo para comprar material electoral para unas futuras elecciones catalanas del próximo 1 de octubre.
Según han informado algunas fuentes a Europa Press el contrato está valorado en 897.000 euros y se conforma de cuatro partes: uno de sobres electorales; otro de papeletas; un tercero de manuales de instrucciones para miembros de mesas electorales y un último para impresos electorales.
Fuentes del Govern consultadas por la misma agencia explican que esta publicación del BOE no supone aún ninguna compra, sino que se publicita qué empresas han sido homologadas para hacerles el pedido cuando se decida formalizar la adquisición del material electoral.
El PSOE no apoya el control a Cataluña
Para el PSOE la medida anunciada la pasada semana por el gobierno de Rajoy de controlar las cuentas catalanas es una forma de echar “más gasolina al fuego”. En rueda de prensa, el Secretario de Organización socialista, José Luis Ábalos, ha insistido en pedir “moderación” y evitar que se anuncien medidas como la del Fondo de Liquidez Autonómico.
Ábalos ha recalcado que el PSOE está «absolutamente de acuerdo» con los «requisitos» del Fondo de Liquidez Autonómico y sus «condiciones» y que el «problema» es que, tal y como se anunció, la medida sonó «a amenaza más que a otra cosa».
«En la aplicación de las leyes la proporcionalidad es muy importante y las amenazas deben hacerse con la suficiente prudencia», ha dicho, avisando de que, si no se hace así, pueden generar el efecto contrario al que se busca. Desde Ferraz consideran que se pueden interpretar como una «agresión». Por eso ha vuelto a apelar al «diálogo» para solucionar el conflicto catalán y a que no se eche «más gasolina al fuego».