El Parlamento Vasco ha reclamado este jueves al Gobierno de Turquía que ponga en libertad de forma «inmediata e incondicional» al presidente de Amnistía Internacional, Taner Kiliç, «ante la inexistencia de pruebas creíbles y admisibles de su implicación» en los cargos relacionados con terrorismo.
En una declaración institucional, la Cámara vasca ha explicado que «tras el fallido golpe de Estado en julio de 2016, los derechos humanos en Turquía han sufrido un alarmante retroceso que ha afectado gravemente a la sociedad civil».
En este sentido, ha recordado que entre junio y julio de 2017, once defensores de derechos humanos, incluidos el presidente de Amnistía Internacional Turquía, Taner Kiliç, y la directora de Amnistía Internacional Turquía, Idil Eser, fueron detenidos acusados de «terrorismo» y de formar parte de un complot para el intento de golpe de Estado.
«Turquía ha encerrado a estos activistas justo cuando más se lesnecesita: los medios de comunicación independientes han sido silenciados, hablar libremente tiene un alto coste y la población turcavive con miedo», subraya la Cámara.
En este sentido, ha afirmado que estas detenciones «hacen más vulnerables a las personas por las que luchaban frente a la implacable purga del gobierno turco». Tras afirmar que «ninguna de estas personas ha hecho nada malo», el Parlamento ha señalado que «sobre todos ellos pesan todavía cargos relacionados con terrorismo, a pesar de que las acusaciones sean ridículas y faltas de fundamento».
Por todo ello, y «ante la inexistencia de pruebas creíbles y admisibles de su implicación en los delitos que se les imputan», el Parlamento Vasco ha pedido al Gobierno de Turquía que ponga en libertad de forma «inmediata e incondicional» a Taner Kiliç y que se retiren todos los cargos que hay contra los once defensores de derechos humanos procesados.