El candidato de ERC a la Presidencia de la Generalitat, Oriol Junqueras, se ha manifestado contento y satisfecho por el aumento de votos que han situado al partido independentista como segunda fuerza en el Parlamento catalán, con 21 escaños, y ha reiterado que estará «al servicio del país».
«Ponemos nuestro resultado al servicio del país y al servicio del proceso hacia la independencia de Cataluña», ha manifestado dirigiéndose al más de medio millar de personas que le esperaban en la sede de ERC en Barcelona.
«ERC asumirá toda la responsabilidad que le corresponda en este momento histórico, estará a la altura de sus responsabilidades», ha añadido, y ha reiterado que buscará las fórmulas más adecuadas para tirar adelante una consulta sobre la independencia.
Así, se ha manifestado contento y satisfecho por el aumento de votos que han situado al partido independentista como segunda fuerza en el Parlamento catalán, con 21 escaños, once escaños más de los diez parlamentarios que cosecharon en las últimas autonómicas de hace dos años.
Se queda cerca del mejor resultado de ERC en democracia, en las elecciones generales de 2004, justo después de constituirse el primer tripartito con ICV-EUiA y PSC: tras trascender que el entonces »conseller en cap» Josep Lluís Carod-Rovira se había reunido con ETA, tuvo que dejar el Govern, y optó por encabezar la candidatura de ERC en las generales.
ERC logró casi 650.000 votos y ocho escaños, frente al único parlamentario que había conseguido en las generales de 2000.
Fue en las autonómicas de otoño de 2003 cuando en el Parlament lograron su máximo –23 escaños–: ERC entonces apostó por hacer al socialista Pasqual Maragall presidente de la Generalitat e impulsar un nuevo Estaut.
El pacto entre el Gobierno del PSOE, CiU, PSC e ICV-EUiA sobre el Estatut implicó según ERC una notable rebaja, por lo que el partido salió del Govern y hubo nuevas elecciones autonómicas en otoño de 2006, donde ERC logró 416.000 votos y 21 escaños, dos menos que en 2003, y el partido volvió a reeditar su pacto en la Generalitat con PSC e ICV-EUiA.
En 2008 el partido notó el desgaste que supuso el segundo tripartito presidido por José Montilla y el inicio de la crisis económica: en las generales, los republicanos pasaron de ocho a tres escaños y perdieron el grupo parlamentario propio en las Cortes.
Estos resultados implicaron una verdadera crisis interna con cuatro candidaturas a liderar el partido: Tras unas primarias, Joan Puigcercós desplazó a Josep Lluís Carod como presidente del partido y Joan Ridao fue elegido como secretario general.