Centenares de personas se manifiestan hoy en el centro de Ereván, en la sexta jornada de la campaña de desobediencia civil organizada por la oposición para desbancar al expresidente y desde ayer primer ministro de Armenia, Serge Sargsián.
«Desde mañana por la mañana toda Ereván debe quedar paralizada. Serge Sargsián y sus siervos no deben tener ninguna posibilidad de desplazarse por Ereván», dijo a sus partidarios el diputado y líder de las protestas, Nikol Pashinián.
Anunció que mañana, jueves, se organizarán piquetes de control en todas las calles de Ereván, que «actuarán únicamente contra los republicanos (la formación de Sargsián) y sus esbirros».
Pashinián hizo un llamamiento al cantante y actor francés de origen armenio Charles Aznavour, una de las figuras más respetadas en Armenia, para que acuda a Ereván.
«Su presencia es imprescindible para acabar con esta mafia sin que se derrame un sola gota de sangre», dijo el líder opositor en su mensaje a Aznavour.
La campaña de desobediencia civil incluye la creación de comités revolucionarios en todas las ciudades.
Las manifestaciones opositoras de ayer en la capital armenia se saldaron con cerca de 80 detenidos.
La oposición acusa a Sargsián, presidente del país durante dos períodos consecutivos de cinco años -tope establecido por la Constitución-, de haber reformado el sistema político con el único fin de conservar el poder.
Según la reforma constitucional aprobada en 2015 y que entró en vigor este año, el presidente de Armenia es elegido por el Parlamento y sus funciones son mayormente representativas, ya que el poder Ejecutivo lo detenta el primer ministro designado por el Legislativo.
Sargsián, de 63 años, dejó la jefatura del Estado el pasado día 9 y ayer el Parlamento, en medio de las protestas opositoras, lo nombró al frente del Gobierno.