«Es una barbaridad de dinero», ha reconocido en declaraciones a Rac1 recogidas por Europa Press, en las que ha explicado que gran parte del coste se lo ha llevado el montaje, el alquiler del Camp Nou y el personal de seguridad.
Casals ha confiado en que se pueda pagar todo con los ingresos derivados de la venta de entradas, y ha avanzado que Òmnium pondrá a disposición de quien lo desee «todo lo que hace referencia a gastos e ingresos» para el concierto.
La presidenta de Òmnium Cultural ha explicado que todos los asistentes al concierto, incluidos los miembros del Govern, pagaron su entrada, y ha remarcado que, además de todos los artistas, hubo mucha gente que colaboró de forma voluntaria.
RENUNCIA A LA SUBVENCIÓN
Antes, en declaraciones a la misma emisora el consejero de la Presidencia y portavoz del ejecutivo catalán, Francesc Homs, había aplaudido la organización del concierto por trasladar «una expresión democrática y pacífica» de apuesta por el »derecho a decidir».
El consejero ha negado que el Concert per la Llibertat haya tenido coste alguno para las arcas de la Generalitat, y ha desvelado que Òmnium Cultural ha renunciado este año a la subvención que tenía comprometida con el Govern por valor de cerca de 500.000 euros.
Preguntado sobre si algo del concierto no le gustó, ha considerado «un error» la referencia a la causa de Palestina que se hizo desde el escenario en un momento del concierto, cuando varias voces interpretaron »L»Estaca» de Lluís Llach.
«Hemos de ser muy astutos y prudentes con según que manifestaciones de según que causas internacionales», ha continuado Homs, que ha esgrimido que este tipo de gestos pueden dificultar la búsqueda de aliados internacionales para Cataluña.