La protesta, que también ha reivindicado la libertad del resto a de presos soberanistas –el conseller de Interior cesado Joaquim Forn y los líderes de la ANC y de Òmnium Cultural, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart– ha pedido la libertad de los «presos políticos», según un comunicado de la ANC.
La alcaldesa de la localidad, Maite Aymerich, ha asegurado: «No nos acostumbraremos a tener a nuestros representantes en la cárcel», y ha lamentado que esta situación no es normal.
El vicepresidente de Òmnium Cultural, Marcel Mauri, ha dicho que el PP, «el partido más corrupto de Europa», no tiene ninguna autoridad moral para pedir a los representantes catalanes que dimitan.
El vicepresidente de la ANC, Agustí Alcoberro, ha asegurado que «tarde o temprano» este conflicto tendrá una solución política, ya que un conflicto político solo se puede resolver por la vía política.
En el acto se ha leído un manifiesto que ha deplorado qué tipo de democracia es la que encarcela a los representantes del pueblo y a los políticos que obedecen el «mandato democrático».