El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha justificado hoy el aplazamiento del decreto del plan de ajustes con el argumento de que necesita conocer de forma detallada los recortes que va a hacer el Gobierno en los Presupuestos Generales del Estado.
Tras reunirse con el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y en rueda de prensa conjunta, Griñán ha puesto como ejemplo la reducción «drástica» de los fondos de las Políticas Activas de Empleo para Andalucía y Extremadura, conocida ayer.
En esa línea, se ha referido al «trato no adecuado» practicado por el Gobierno de Mariano Rajoy, con insinuaciones sobre las cuentas de Andalucía o su endeudamiento, cuando la realidad, ha dicho, ha sido que su nivel está «muy por debajo» del resto y ha presentado su plan de ajuste y ha sido aprobado por el Consejo de Política Fiscal y Financiera.
Griñán ha subrayado la «estricta lealtad» de Andalucía respecto al Ejecutivo, a pesar de que éste, ha señalado, haya sembrado dudas sobre la comunidad.
A su juicio, el Gobierno ha buscado más culpables que soluciones y el déficit de la Administración General del Estado es el doble que el de las comunidades autónomas.
Para Griñán, es necesaria una política de ajustes y de control del déficit en la que colaboren todas las administraciones y, aunque Andalucía «no está de acuerdo», hará todo lo posible por cumplir.
En ese contexto, se ha referido a los recortes en educación y su aplicación en Andalucía, «condicionada por las políticas de Rajoy» y ha precisado que no aplicarán el ratio previsto de niños por aula.
Ha precisado que pasar de 35 a 37,5 horas a los docentes puede significar la supresión de más de 23.000 empleos públicos a tiempo completo.
De ahí, ha dicho, que hayan decidido negociar con los sindicatos la aplicación de este decreto y que se hayan dado de tiempo hasta que se aprueben definitivamente los Presupuestos.
Griñán ha destacado que pretenden no despedir a nadie, a pesar de que tienen que reducir 770 millones de euros, y ha añadido que no tomarán ninguna decisión que suponga la privatización de un servicio público, tampoco en sanidad, «porque ahí no hay ahorro, sino ideología».
Tras referirse a la subida de impuestos por parte del Gobierno central, ha insistido en que la Junta «cumplirá solo con lo obligatorio» de los decretos sobre educación y sanidad.
Preguntado por si en su comunidad se van a subir las tasas universitarias, el presidente andaluz ha dicho que, si se hace, ese dinero se dedicará a aumentar las becas.