El Ejecutivo catalán toma esta decisión después de que el 26 de junio ya anunció la reapertura de seis delegaciones en el extranjero que fueron cerradas cuando el Gobierno central aplicó el artículo 155 de la Constitución e intervino la autonomía catalana.
Manonelles y Marcén ya era responsables de las mismas delegaciones cuando fueron cesados por el 155, por lo que con su nuevo nombramiento el Govern buscar la «restitución» de cargos que prometió cuando los consellers asumieron el cargó y se materializó el fin de la intervención autonómica.