El Consejo de Ministros de Egipto declaró hoy a los Hermanos Musulmanes como «grupo y organización terrorista», señaló el viceprimer ministro y titular de Enseñanza Superior, Hosam Isa.
En declaraciones difundidas por la agencia estatal de noticias Mena, Isa informó de la decisión del Gobierno, después de que ayer un ataque suicida contra una sede policial causara al menos trece muertos y 134 heridos en la ciudad de Mansura, en el delta del río Nilo.
UN GRUPO YIHADISTA REINVINDICA EL ATENTADO
Un grupo yihadista egipcio reivindicó hoy el atentado perpetrado ayer contra la sede de la Dirección de Seguridad de la provincia egipcia de Dakahliya, en el delta del río Nilo, que causó al menos trece muertos y 134 heridos.
En un comunicado difundido en foros yihadistas, el grupo «Ansar Beit al Maqdis» (Seguidores de la Casa de Jerusalén) dijo que atacó el edificio policial «en respuesta a las prácticas del régimen apóstata que lucha contra la ley islámica, derrama la sangre de los musulmanes y viola el honor de nuestras mujeres y hermanas».
La organización extremista, que suele operar en la península del Sinaí, detalló que el atentado fue cometido por un suicida y tuvo como objetivo la Dirección de Seguridad, «uno de los bastiones de los infieles y de la tiranía».
CONTINUARÁN CON LAS PROTESTAS A PESAR DE LA PROHIBICIÓN
Un dirigente de los Hermanos Musulmanes llamó a sus partidarios a continuar las manifestaciones de protesta contra las nuevas autoridades en Egipto, calificando de «inválida» la decisión del gobierno de declararles una «organización terrorista».
«Las manifestaciones van a seguir, eso es cierto», declaró Ibrahim Mounir, miembro de la dirección de la cofradía en exilio en Londres. Los islamistas manifiestan casi a diario en Egipto para reclamar el retorno al poder del presidente Mohamed Mursi, destituido por el ejército el 3 de julio.
El gobierno egipcio declaró a los Hermanos Musulmanes del destituido presidente Mohamed Mursi organización «terrorista», y prohibió todas sus actividades, incluyendo manifestaciones, acusándolos de perpetrar un atentado el martes contra la policía.
La cofradía ha sido declarada «terrorista», y el gobierno ha prohibido todas sus actividades, indicó el viceprimer ministro Hossam Eissa.
Eissa agregó que el gobierno decidió «castigar conforme a la ley a quien pertenezca a ese grupo».