El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, se ha referido hoy en Barcelona al debate soberanista abierto en Cataluña y ha afirmado que «ni España es el problema ni la independencia la solución«.
Gallardón, que ha participado en un almuerzo en el Círculo de Economía de Barcelona, ha advertido que es un «error» pensar que con la independencia se solucionarían los problemas económicos de Cataluña y ha remarcado que las mejores estructuras de Estado para los catalanes son las que les proporciona España.
«Una hipotética independencia de Cataluña no significaría sacar a Cataluña de España, sino acabar con España, porque España no tiene sentido sin Cataluña», ha remarcado el ministro, que ha vaticinado que si triunfara el proceso independentista catalán España no podría seguir en el euro.
«No se puede concebir una España sin Cataluña, sería una realidad radicalmente distinta», ha aseverado el ministro, que ha insistido en que «Cataluña no es una extremidad que se pueda arrancar del tronco».
Gallardón ha advertido de que el proceso secesionista catalán tendría unas consecuencias económicas «preocupantes», con un retroceso que se prolongaría durante generaciones, ya que España «no podría sobrevivir» en su permanencia en el euro.
El ministro de Justicia, que ha desvelado que muchos de los comensales le han mostrado también su preocupación por las consecuencias del debate soberanista abierto en Cataluña, ha alertado además de que sería un «error» pensar que con la independencia se solucionarían los problemas económicos de Cataluña.
Gallardón, que ha invocado en varias ocasiones la Constitución como garantía de la unidad de España, ha remarcado que las mejores estructuras de Estado para los catalanes son las que les proporciona el Estado español.
Para el ministro, aunque España sea un país pequeño, tiene una dimensión «suficiente» para que sus estructuras puedan defender los intereses de todos los españoles por igual.
«El Estado que necesita Cataluña, que reclama Cataluña para defender sus intereses, es y tiene que ser el español», ha señalado Gallardón, que ha sostenido que la sociedad catalana «jamás» estaría «mejor defendida» por un Estado «más pequeño» que el español.
En este sentido, ha apuntado que la solución no pasa por «ser más pequeños», sino por «ser mejores», por lo que la aspiración de Cataluña no tendría que ser «salir de España», sino «liderar España».