Un presunto miembro de una red de reclutamiento de jóvenes para las filas yihadistas en Siria fue detenido hoy en la región francesa de Lyon, donde en la últimas 48 horas ya han sido arrestadas otras cinco personas, anunció el ministro francés de Interior, Bernard Cazeneuve.
En un comunicado, Cazenueve señaló que «este individuo, particularmente peligroso, y vinculado directamente con los arrestados los días precedentes, ha tenido un papel muy activo» en el envío a Siria de jóvenes (mujeres, en particular) hacia Siria en los últimos meses.
Esta nueva operación se llevó a cabo el día en que la Asamblea Nacional francesa adoptó por unanimidad un proyecto de ley para reforzar la lucha antiterrorista, que entre otras disposiciones prevé la retirada del pasaporte y del carné de identidad a personas susceptibles de irse al extranjero a combatir con grupos terroristas o extremistas.
Esas personas pasarán a estar en los ficheros Schengen, para poder ayudar a ser localizados y detenidos si fueran a otros países europeos violando la prohibición administrativa. En ese caso, se enfrentarían a penas de tres años de cárcel y 45.000 euros de multa.
El texto, que continuará su tramitación en el Senado a mediados de octubre, también permite el bloqueo de sitios web que hagan apología del terrorismo, para lo cual la autoridad administrativa podrá exigir a los proveedores de internet la retirada de los contenidos.
Igualmente crea una nueva figura penal de terrorismo para individuos que se hayan radicalizado de forma independiente, principalmente en internet, y planeen acciones por su cuenta, fenómeno que se conoce como el del «lobo solitario».
Según las cifras dadas por Cazeneuve el pasado fin de semana, 930 franceses o residentes en Francia están actualmente implicados en movimientos yihadistas en Siria e Irak, además de los 36 que han muerto allí.
De esa cifra total, 350 siguen enrolados en esos dos países (60 son mujeres), 170 están en tránsito para integrarse en esas organizaciones.