El oficial navegaba a bordo del buque cuando desapareció en las proximidades de la base Juan Carlos I, en la isla de Livingston. Tras seis horas de búsqueda, se localizó su cuerpo y se confirmó su muerte.
Actualmente, los restos del capitán se encuentran a bordo del buque, que navega hacia el puerto de Usuahia (Argentina) para proceder a su repatriación.
La Armada Española ha afirmado que es «un día muy triste» y ha transmitido su pésame a los familiares y amigos del capitán. «Descanse en paz», ha concluido la armada en un hilo de Twitter.