El Ejecutivo en funciones de Mariano Rajoy ha expresado su solidaridad con todos los países perjudicados y ha mostrado su deseo de «rápida normalización de las condiciones de vida» de todos los afectados.
El Gobierno ha seguido con «consternación» y «hondo pesar» las «devastadoras» consecuencias del paso del huracán Matthew por el Caribe y el Atlántico centro-occidental, con más de un centenar de muertes e ingentes destrucciones en las infraestructuras de Haití.
El huracán también ha provocado pérdidas humanas en la República Dominicana y serios daños materiales en Venezuela, Colombia, Jamaica, Cuba, Bahamas y Estados Unidos.