El candidato de Izquierda Unida a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, aseguró este miércoles que la unidad popular es sumar fuerzas para defender los derechos de los ciudadanos “por encima del carné que tienes en el bolsillo”.
Lo hizo en un acto electoral en Málaga, ciudad en la que Izquierda Unida se ha integrado en una candidatura de unidad popular, justo cuando la polémica en Madrid arrecia por el respaldo de cargos públicos y dirigentes de la coalición a la lista de Ahora Madrid, que rivaliza con la impulsada por la dirección regional de IU encabezada por Raquel López.
Garzón dedicó prácticamente toda su intervención a criticar al PP, del que dijo que esta campaña electoral ha recuperado “las tres grandes plagas” de las que echa mano cuando se acercan las elecciones: “La corrupción, la xenofobia y José María Aznar”, y que sintetizan lo que es ese partido.
Se refirió al PP como una “estructura” que está deteriorando el estado social, no solo por los recortes en sanidad, educación o pensiones, sino por “generalizar” la pobreza de los trabajadores al “desguazar” los empleos y sustituir uno de calidad con salario digno por dos o tres precarios.
Acusó también al PP de “torturar” las estadísticas para poder decir que se está superando la crisis y para que el presidente, Mariano Rajoy, pueda decir que los ciudadanos ya no están preocupados por el paro, algo que demuestra que “vive en una burbuja”.
Se mostró convencido de que está en juego el futuro de las próximas generaciones, y apeló a los valores de la izquierda para convencer al 40% de los electores que, según las encuestas, permanecen indecisos ante las elecciones del domingo. Fue en ese contexto en el que aseguró que esos valores consisten en defender a los trabajadores y combatir las injusticias, y cuando eso sucede, por ejemplo cuando se intenta parar un desahucio, “nadie pregunta que carné tienes en el bolsillo”. Eso es unidad popular, sentenció, encontrarse defendiendo a los ciudadanos “por encima de los carnés que tenéis en el bolsillo”.
Garzón pidió además a los militantes de IU que no solo combatan en el ámbito electoral, sino en el cultural, leyendo, formándose y haciendo pedagogía, para que los ciudadanos piensen por sí mismos y no reflejen los intereses de otros sin ser conscientes de ello. Así podrán asumir que dar empleo a un millón de parados a costa de 9.200 millones no es una “utopía”, sobre todo cuando se han dedicado 74.000 millones a rescatar al sistema financiero.
Aunque en Izquierda Unida son conscientes de que en muchos territorios se juegan su entrada en las instituciones, Garzón aseguró que su objetivo no es “la marginalidad” y llegar al 3% o al 5% del voto, sino afrontar en primera línea los grandes retos y construir una sociedad más justa.