El encuentro, que tendrá lugar en el auditorio del campus de la Ciutadella de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) a partir de las 10 horas, el primero que celebran una vez una vez configurados todos los cuadros y estructuras de la formación, y debe servir para empezar a desgranar la propuesta política del partido para Catalunya, cuyas bases se expusieron en el manifiesto fundacional aprobado en julio.
El régimen de incompatibilidades fue una de las cuestiones más espinosas del cónclave y, tras una propuesta de las juventudes aprobada de madrugada, se acordó que los dirigentes puedan ejercer un máximo de dos cargos –orgánicos o institucionales–, y después se nombraron a algunos dirigentes a sabiendas de que incumplían el régimen, pese a que a la misma normativa les da seis meses para renunciar a alguno de sus cargos.
Sin embargo, diferentes sectores de la formación, que ya se alzaron en el congreso de julio en el que se daba carpetazo a la extinta Convergència, reclaman que se aborde ya el cumplimiento del régimen de incompatibilidades.
Fuentes consultadas por Europa Press aseguran que será uno de los puntos que tratará el coordinador de Organización, David Bonvehí, cuando exponga su informe relativo a la organización interna del partido, en el que recordará que hay margen para cumplir con este régimen hasta finales de enero, al margen de que luego haya quien quiera profundizar en este aspecto en el turno abierto de palabras.
Según dichas fuentes, este debate obedece a una pugna interna liderada por «los que perdieron» en el cónclave de julio, en el que sitúan al portavoz de JxSí en el Parlament, Jordi Turull, y al portavoz del PDECAT en el Congreso, Francesc Homs, contra la nueva dirección, encabezada por Marta Pascal y Bonvehí, para desgastarlos.
Si que dejan fueran de ello al expresidente de la Generalitat y presidente del partido, Artur Mas, y al presidente catalán, Carles Puigdemont.
PRINCIPAL AFECTADA: NEUS MUNTÉ
El cargo más importante afectado por esta norma es la consellera de Presidencia, Neus Munté, que está obligada a dejar su escaño en el Parlament porque también es vicepresidenta del PDECAT.
Aunque Munté avanzó en una entrevista a Europa Press que dejaría el escaño al inicio del curso parlamentario, aún no lo ha hecho alegando que tiene seis meses para cumplir con el régimen de incompatibilidades.
También resultan afectados por estas incompatibilidades algunos de los miembros de la dirección del PDECAT: el diputado y alcalde de Valls (Tarragona), Albert Batet; el diputado y alcalde de Besalú (Girona), Lluís Guinó; la diputada y alcaldesa de Calella (Barcelona), Monserrat Candini, y la directora general de Cooperación Interdepartamental del Govern, Elsa Artadi –las incompatibilidades establecen que una directora general no puede tener cargo en la dirección–.
Algunas fuentes constatan que pueden escoger qué cargo dejar, y por lo tanto no tienen que seguir el mismo camino que Munté y renunciar a su escaño, por lo que podría ocurrir que decidieran salir de la dirección o dejar de ser alcaldes.
Los estatutos también contemplan que una comisión para la calidad democrática, la transparencia, el cumplimiento ético y de garantías, que aún no se ha creado, pueda emitir un informe sobre la situación individual de cada cargo, pero una posible excepción debe aprobarse con tres quintas partes de los miembros del Consell Nacional.
MILITANTES
El nuevo partido cuenta actualmente con 12.000 asociados, un 20% de los cuales no militaban en la antigua Convergència, tal y como avanzó la coordinadora general del PDECAT, Marta Pascal.
Sin embargo, esta cifra queda lejos de los 14.620 militantes que tenía CDC, según la última cifra oficial que se dio y que fueron los que pudieron participar en la consulta interna de mayo para decidir si se creaba un nuevo partido.