Para los estudiantes que, cuando están lejos de casa, echan de menos la comida de sus madres, para los trabajadores sin tiempo para cocinar, para las personas que no calculan bien las cantidades cuando se meten entre los fogones y al final acaban tirando la comida, o para quienes, simplemente, quieren hacer de su pasión un modo de ganar un poco de dinero.
Cookisto es una comunidad online que está causando furor en Atenas y que acaba de ponerse en marcha en Londres. Ha sido creada por Michalis Gkandas, un griego que ha vivido en Austria, Francia, China y Estados Unidos, pero que regresó a su país principalmente porque echaba de menos la cocina de su madre, y donde, junto a su amigo Petros Pitsillis, decidió poner en marcha su proyecto.
A través de la web cualquier persona que sepa cocinar puede ofrecer sus platos a ciudadanos hambrientos, denominados ‘foodies’ en inglés, que deseen comer bien a buen precio.
Para acceder a la comunidad basta con registrarse, buscar qué se está cocinando cerca del lugar de residencia, seleccionar el plato que se desee degustar ese día, y acordar el modo de recogida, bien quedando en algún lugar concreto e incluso, recibiéndolo en casa.
Los ‘cookistas’ son personas que no quieren, no pueden, o no saben cocinar, a quienes les gusta la comida casera, o que tienen un acontecimiento especial y necesitan ofrecer platos de calidad. También son aquellos cocineros anónimos que quieren compartir sus especialidades y ganar algo de dinero haciendo lo que más les gusta.
No obstante, hay que respetar una serie de normas. A los cocineros se les recomienda no entregar la comida en su propio domicilio por motivos de seguridad y hacerlo todo a través de la web en la que sólo las personas registradas podrán tener acceso a sus datos. Además, tienen que ir actualizando el número de raciones que ofrecen.
A los ‘foodies’ se les pide que después de haber degustado la comida, evalúen el plato en la web, teniendo en cuenta el servicio, la proporción de la ración, y el precio, de modo que será visible en la comunidad aportándola un mayor valor.
Por cada operación que se realiza al día, Gkandas y su equipo se llevan una pequeña parte, que es de donde obtienen los beneficios de su negocio. De momento Cookistas ha aterrizado en Londres donde se espera tenga una gran acogida, aunque parece muy probable que continúe expandiéndose para tratar de satisfacer las necesidades de quienes no quieren privarse de una buena comida casera.