Michael Moore narra en Sicko la situación del sistema sanitario norteamericano. 50 millones de personas son excluidas de este modelo que se basa en compañías privadas y en aseguradoras porque no pueden pagarlo.
El documental analizará a estas empresas cuyo principal objetivo son los beneficios económicos, y a las aseguradoras, que premia a los empleados que más rentabilidad obtienen al denegar prestaciones y reclamaciones a los asegurados.
En »Sicko», Moore indagará en casos reales en los que personas con cobertura médica se ven afectadas por este afán lucrativo de las aseguradoras. Concretamente, varias mujeres y una niña mueren por falta de esos servicios, entre otros casos.
La película documental pretende reflexionar sobre la naturaleza del sistema y convoca al pueblo estadounidense a demandar cambios políticos que lleven al sistema a acercarse a la sanidad universal gratuita que gozan otros países mostrados como Francia, Canadá, Reino Unido y Cuba.
De hecho, el director viajará hasta Gran Bretaña y Francia para comprobar cuál es la cobertura sanitaria de los países que gozan de un nivel de desarrollo similar al de Estados Unidos.
Además, Moore indagará en una contradicción muy llamativa. Bomberos y socorristas voluntarios que ayudaron a las víctimas durante el 11 de septiembre de 2001 padecen secuelas crónicas del rescate y no disfrutan de asistencia médica porque han perdido su cobertura. Sin embargo, los detenidos por terrorismo en Guantánamo disponen de instalaciones sanitarias y personal cualificado.
Este viernes, a partir de las 22.00, la sanidad tendrá que pasar un examen completo en »Sicko».