«Las medidas diferencias de China son racionales y contenidas», indicó el portavoz ministerial, subrayando que su puesta en marcha ha sido posible tras escuchar todas las opiniones y valorar cuidadosamente su impacto, especialmente el bienestar de la gente y el mantenimiento de la cadena global de la industria.
En este sentido, el Ministerio de Finanzas ha indicado que la fecha de entrada en vigor de estas dependerá de las acciones por parte de EEUU, subrayando que «China se reserva el derecho de introducir contramedidas adicionales».
«China siempre cree que las consultas sobre la base del respeto mutuo y la igualdad es la manera más efectiva de resolver las disputas comerciales. Cualquier amenaza unilateral o chantaje solo provocará una intensificación de los conflictos y el daño a los intereses de todas las partes», añadió el Ministerio en un comunicado.