París descubre hoy el montaje «Who is me. Pasolini – Poeta de las cenizas», de Àlex Rigola, nuevo director de los Teatros del Canal, para los que prepara una programación «transversal y arriesgada», con la que piensa dar «otro rumbo» a esa escena madrileña, declara en una entrevista con Efe.
El dramaturgo retorna a Francia con este montaje minimalista «pensado para ir de festivales», tras haber mostrado «2666», una creación inspirada en esa monumental novela de Roberto Bolaño, en 2009, recuerda.
La pieza pasoliniana llega a París solo unos días después de que el exdirector del Teatre Lliure (2003-2011), estrenase en ese escenario de Barcelona «Ivanov», su primer Chéjov, un proyecto en el que había empezado a trabajar antes de que le ofrecieran codirigir los Teatros del Canal en colaboración con Natalia Álvarez Simón.
Inspirado en un poema muy personal e íntimo del cineasta italiano publicado después de su asesinato, «Who is me. Pasolini» puede verse hasta el jueves en el Festival «Chantiers d’Europe», donde España es este año uno de los seis países invitados junto con Grecia, Portugal, Croacia, Reino Unido y Holanda.
Como en las otras salas donde estrenó su trabajo sobre ese hombre «en ocasiones radical» y «lleno de contradicciones», el escenario está ocupado por una caja de madera «de las que se usan para transportar obras de arte», donde caben tan solo el actor argentino Gonzalo Cunill y una treintena de espectadores, explica.
Es en ese espacio «íntimo» y «casi sagrado» donde Cunill recita, «casi como un médium» que «al final acaba confundiéndose con Pasolini», el largo poema en el que el cineasta italiano repasó toda su vida en forma de una falsa entrevista.
En el Espacio Cardin, con todo el patio de butacas vacío, sin más público que el que puede entrar en el contenedor, Rigola (Barcelona, 1968) presenta su obra en la octava edición del festival parisino, creado con el objetivo de hacer descubrir a su público el teatro del sur de Europa.
El exdirector del Teatre Lliure y de la sección de teatro de la Bienal de Venecia entre 2010 y 2016, reconoce tener en estos momentos una agenda bastante apretada y no avanza aún nombres ni títulos de la que será su primera temporada madrileña.
«Los veremos a finales de junio», explica el responsable de teatro de la institución, desde la que quiere ver «cómo la propia ciudad va absorbiendo la programación» para ir adaptándola en los próximos años.
El director, en los Teatros del Canal desde octubre de 2016, se ha marcado un periodo de «no más de ocho años» al frente, como hiciese su anterior director, Albert Boadella, y afirma no entender a quienes «están más de diez años» a cargo de un establecimiento financiado con dinero público.
Destaca, igualmente, que si bien el apoyo económico que reciben las compañías españolas es «tres o cuatro veces inferior» a lo que se destina en países como Francia, España cuenta con «una serie de artistas que destacan» a nivel internacional.