La juez del Supremo Stella Mutuku ha indicado que el condenado, Nahashon Mutua –quien era oficial a cargo de la comisaría en la que tuvo lugar el suceso–, abusó de su autoridad y violó la Constitución.
«Iba en favor de sus intereses violar la Constitución para encubrir lo que hizo», ha dicho, antes de recalcar que «la Fiscalía ha demostrado que no hay dudas razonables» en torno a su responsabilidad.
Mutua negó su responsabilidad en la muerte del sospechoso, Martin Koome, y afirmó que el hombre fue agredido por sus compañeros de celda debido a los ruidos que hacía poco después de su entrada en la celda.
Activistas han denunciado en numerosas ocasiones que la Policía hace un uso excesivo de la fuerza debido a la práctica impunidad con la que cuentan los agentes en este tipo de incidentes. Las autoridades establecieron en 2011 un organismo de vigilancia.