En este proceso había un total de 93 acusados, 56 de los cuales fueron juzgados ‘in absentia’. Además de Badie están procesados en este caso Nihad el Qasim Abdel-Wahhab, Sayyed Heikal, Jalid Syed Nayi y Abdelrahman Shukri. Esta sentencia es ya definitiva e inapelable, informa el diario estatal egipcio ‘Al Ahram’.
Entre los cargos de los que se acusa a los procesados figuran asesinato, incitación al terrorismo o vandalismo, en relación a una serie de enfrentamientos que tuvieron lugar en julio de 2013 en la ciudad de Ismailiya durante las protestas contra el golpe de Estado del 3 de julio de 2013 impulsado por el jefe del Ejército, Abdelfatá al Sisi (actual presidente) contra el presidente islamista democráticamente electo Mohamed Mursi. Concretamente les acusan del incendio de una comisaría de una escuela religiosa de monjas.
Los juicios masivos y las sentencias a muerte se han multiplicado desde el golpe de Estado contra Mursi. Las organizaciones defensoras de los Derechos Humanos han acusado al Gobierno de promover una represión de la disidencia.