Las dos cooperantes españolas de Médicos sin Fronteras (MSF) fueron secuestradas el 13 de octubre de 2011 en el campamento de refugiados keniata de Dadaab.
Según el Ministerio de Asuntos Exteriores las dos secuestradas realizaban trabajos logísticos en este campo de refugiados, el más grande del mundo, y donde la ONG trabaja en la construcción de un hospital.
La policía keniata atribuyó el rapto a las milicias de Al Shabab, vinculadas al grupo terrorista Al Qaeda, aunque un portavoz de la milicia islamista negó en 2011 cualquier implicación en los hechos.
Según fuentes de MSF en Kenia, el suceso ocurrió en torno a las 13.30 horas (hora local) en el campamento IFO II oeste, en Dadaab, a unos cien kilómetros de la frontera con Somalia. Según Javier López Cifuentes, un alto cargo de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en Kenia, «los hechos habrían tenido lugar en un puesto de salud dentro del campamento».
Desde MSF-Kenia detallaron que los secuestradores asaltaron el coche donde iban las cooperantes y le dispararon un tiro en el cuello al conductor. «Este fue ingresado en un hospital del propio campamento de refugiados y según los últimos partes médicos evoluciona favorablemente», abundaron las citadas fuentes, que añadieron que aquel día no consiguieron establecer contacto con las cooperantes.
La Policía y el Ejército keniatas desplegaron un amplio dispositivo que contaba con helicópteros para rastrear la zona. Y atribuyeron el secuestro a Al Shabab. Un portavoz de la policía contó que se había desplegado un dispositivo de búsqueda masivo en la región que cuenta con varias unidades de las Fuerzas de Seguridad para tratar de localizar y rescatar a las mujeres cooperantes.
Un medio keniata llegó a informar que las cooperantes fueron trasladadas a Somalia poco después de su secuestro. El 4×4 en el que iban cuando fueron raptadas fue visto huyendo hacia la frontera». Acto seguido, la policía cerró las fronteras del país.
Las cooperativas actuaron colocando escoltas a todos los equipos de las agencias de la ONU que trabajasen en Dadaab. No es el caso de los cooperantes de MSF, ya que no solían llevar ecoltas extra.
Cuatro mujeres secuestradas en octubre de 2011
Este secuestro de Al Shabab elevaba a cuatro el número de mujeres secuestradas en Kenia por este grupo terrorista somalí. Además de las cooperantes españolas, fueron raptadas una mujer británica, y una francesa en la zona turística de Lamu.
Tampoco es el primer ataque de Al Shabab en los campos de Dadaab, que acogen a centenares de miles de refugiados de Somalia. El 21 de septiembre, un conductor keniano que trabajaba para la ONG CARE Internacional fue secuestrado.
Por otro lado, en los últimos cuatro años, otros cuatro cooperantes españoles han sido secuestrados en África. En 2007, la médico Mercedes García, también de MSF, fue raptada el 26 de diciembre en la ciudad de Bossaso, en Puntlandia. Fue liberada tras siete días de cautiverio.
El 29 de noviembre de 2009, tres cooperantes de Barcelona-Acció Solidaria fueron secuestrados en Mauritania. Uno fue liberado en marzo de 2010, y los otros dos en agosto de ese mismo año.
Antes, sólo hubo un episodio similar en febrero de 1998, cuando dos misioneros y un cooperante fueron secuestrados en Sierra Leona. Fueron liberados ese mismo día.
El año pasado, Al Shabab también secuestró en la ciudad de Dollo Ado a dos trabajadores etíopes de la ONG española ADRA. Tras quedarse con el vehículo, fueron liberados en la frontera somalí.