El accidente tuvo lugar a las 5.30 de la mañana (hora local) cuando dos autobuses que se desplazaban por la autopista Norte-Sur del país se chocaron cuando transportaban a varios trabajadores de una fábrica.
La Policía de la provincia de Seberang Prai ha confirmado el siniestro y ha explicado que uno de los autobuses –en el que viajaban trabajadores indonesios y nepalíes– se detuvo tras registrar un problema en el motor, lo que provocó el accidente.
«El otro vehículo, en el que viajaban una quincena de trabajadores, no pudo frenar a tiempo y se chocó contra el primer autobús», ha señalado el portavoz de las fuerzas de seguridad Nik Ros Azhan Nik Abdul Hamid.
«Ocho personas han muerto por el momento y un total de 23 presentan serias heridas. Otras diez tienen heridas leves», ha añadido.