Según una encuesta de EMG realizada entre el 24 y el 25 de enero, el PD obtendría el 30,7 por ciento de los votos, aunque la unión de partidos de centro izquierda conseguiría el 36,8 por ciento, ya que Izquierda, Ecología y Libertad (SEL) ha conseguido subir en las encuestas.
La formación Pueblo de la Libertad (PDL), del ex primer ministro Silvio Berlusconi, ha subido un punto porcentual hasta el 20 por ciento, y su asociación con la Liga Norte granjearía a ambos partidos el 28 por ciento de los votos.
La coalición de centro que apoya que el primer ministro, Mario Monti, vuelva a ser elegido jefe de Gobierno, alcanzaría el 9,6 por ciento de los votos, con una subida del cinco décimas.
El Banco de Italia acusó hace unos días a la entidad toscana de «esconder» la información relativa a una serie de transacciones con derivados que podrían haber causado a la institución, pendiente aún de un segundo rescate público, pérdidas por importe superior a los 700 millones de euros.
LAS AUTORIDADES DEFIEDEN LA SOLIDEZ DE LOS BALANCES
Por su parte, el Comité italiano para la salvaguardia de la estabilidad financiera ha defendido que el balance del banco Monte dei Paschi es «sólido» y ha asegurado que la polémica en torno a posibles irregularidades en las cuentas la entidad no tiene ningún impacto en el conjunto del sistema bancario italiano.
El Comité se ha reunido en Roma presidido por el ministro de Economía y Finanzas de Italia, Vittorio Grilli, y ha contado con la presencia del gobernador del Banco de Italia, Ignazio Visco, el presidente de Consob, Giuseppe Vegas, y el presidente del Ivass, Fabrizio Saccomanni.
«El Comité ha tratado el asunto del banco Monte dei Paschi di Siena, constatando que la institución cuenta con un balance general sólido y que las tensiones que han afectado a la entidad no producen efectos sobre el sistema bancario en su conjunto», explicó el Ministerio en un comunicado.
Asimismo, el comité ha examinado también en su encuentro la situación del sector bancario, del asegurador y de los mercados financieros, reconociendo «signos de mejora, debido principalmente a la relajación de las tensiones sobre el riesgo soberano».