Estados Unidos expresó este miércoles su escepticismo sobre los eventuales resultados de una reunión cuatripartita con Rusia, Ucrania y la Unión Europea a celebrarse la semana próxima con el objetivo de intentar solucionar la crisis ucraniana.
«Debo decir que no tenemos grandes esperanzas en estas conversaciones pero pensamos que es muy importante dejar abierta esta puerta diplomática», dijo la secretaria de Estado adjunta de EEUU para Europa, Victoria Nuland.
Esta reunión, anunciada el martes entre Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y Ucrania, «debería» tener lugar el 17 de abril en Viena, según una fuente diplomática de la UE en Bruselas. Sin embargo, el lugar, la fecha y el programa del encuentro no han sido aún anunciados oficialmente.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, y su par ruso Serguei Lavrov acordaron el lunes mantener un «diálogo directo» entre los cuatro actores principales del conflicto. Moscú planteó que los prorrusos de Ucrania puedan también estar representados en la reunión.
Catherine Ashton, jefa de la diplomacia de la UE, anunció su participación en el encuentro, junto a Kerry, Lavrov y el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania Andrei Dechtchitsa.
«Campaña orquestada en Moscú»
La situación en Ucrania seguía siendo tensa este miércoles, particularmente en el este rusoparlante, donde prorrusos y leales a Kiev mantenían su enfrentamiento bajo la amenaza de miles de soldados rusos apostados en la frontera.
La secretaria de Estado adjunta de EEUU para Europa, Victoria Nuland, reiteró el miércoles ante una comisión del Congreso estadounidense las declaraciones de Kerry de la víspera acusando a Rusia de estar detrás de los enfrentamientos en el este de Ucrania y de buscar generar «el caos».
«Lejos de constituir una serie de acontecimientos espontáneos, estos incidentes reflejan una campaña orquestada de incitación, de separatismo y de sabotaje al Estado ucraniano desarrollada con ayuda de los servicios secretos rusos», dijo la diplomática.
Nuland lanzó también una advertencia a Rusia y a su presidente Vladimir Putin. «Nuestro mensaje a Putin y a Rusia es claro: el territorio de la OTAN es inviolable», afirmó, en alusión a la eventualidad de que Moscú amenace la integridad de cualquier estado miembro de la alianza atlántica.
La alta funcionaria estadounidense se refirió igualmente a «informaciones de violaciones a los derechos humanos en Crimea tras la ocupación rusa» de esa península, sin brindar más detalles.