«La posición de Estados Unidos sobre Siria es clara: el régimen sirio debe poner fin a la represión contra su propio pueblo, y el presidente Asad debe dejar su cargo», dijo Biden al periódico Hurriyet.
Biden, quien llegó el jueves a Turquía para reuniones con altos dirigentes gubernamentales, afirmó que la administración estadounidense, que ya ha exhortado a Asad a que se retire del poder, insiste en una «transición pacífica» en Siria.
«Una estabilidad durable no puede ser asegurada en Siria, salvo con la llegada al poder de un gobierno que escuche y se ponga a disposición de su pueblo, en vez que apuntarle un arma», dijo, para insistir en la «estabilidad» de Siria, país que comparte una larga frontera con Turquía.
El vicepresidente estadounidense saludó la postura del gobierno turco con relación a Siria, y el inicio del diálogo con representantes de la oposición siria.
Varios países, incluyendo Estados Unidos y Turquía, ya alertaron sobre las posibilidades de una guerra civil en Siria, donde la represión ya dejó un saldo de por lo menos 4.000 muertos desde marzo, de acuerdo a la ONU.