Las autoridades venezolanas han multado a la empresa suiza Nestlé con 88.000 dólares (unos 65.720 euros) por haber retenido supuestamente 25 toneladas de leche en polvo para bebés, según informó la prensa venezolana citando al organismo de defensa de los consumidores.
La leche fue encontrada en los almacenes de Nestlé en la ciudad de Barcelona, en el estado venezolano Anzoátegui. «Este producto no se encontraba en ninguno de los comercios del estado, sin embargo, el 24 de noviembre Nestlé recibió 10 toneladas en su almacén de Barcelona; y el 28 del mismo mes, recibió otras 15 sin que hubiesen comercializado las primeras», afirmó el responsable regional del organismo defensor de los consumidores (Indepabis), Arquimedes Barrios.
Por su parte, Nestlé se defendió asegurando que no había podido distribuir la leche por la falta de vehículos. A pesar de ello, las autoridades venezolanas han asegurado que la leche encontrada será llevada a los puntos de venta y el almacén será fiscalizado para que futuros cargamentos del producto sean distribuidos, añadió Barrios.
La sanción a Nestlé se enmarca en la reciente entrada en vigor de una ley que regula los precios de todos los bienes y servicios y que, según el gobierno de Hugo Chávez, busca contener la alta inflación nacional (22,7% en lo que va del año).
Los empresarios consideran la norma un golpe a la economía de mercado y advierten que podría aumentar la escasez de productos que, como la leche, desaparecen cíclicamente de los comercios. La leche y otros productos de la canasta básica tienen el precio regulado hace más de seis años en este país sudamericano.
Hace unos días Chávez acusó a la empresa italiana Parmalat, controlada por el grupo francés Lactalis, de «acaparar» leche y alertó con «mecanismos de expropiación» después que autoridades decomisaran 210.000 kilos de leche en polvo en un depósito de esta compañía.