El editor del »Jornal Da Praça» y de »Mercosul News», Paulo Roberto Cardoso Rodrigues, fue asesinado el 12 de febrero, cuando dos hombres montados en una motocicleta le dispararon mientras conducía de camino a su casa, en Ponta Porá, cerca de la frontera con Paraguay.
El editor del diario digital Vassouras, Mario Randolfo Marques Lopes, fue secuestrado y asesinado el 8 de febrero junto a su novia en Barra do Piraí, en el estado de Río de Janeiro, en el sureste de Brasil.
«Estos crímenes son un intolerable ataque contra la profesión de periodista y contra el derecho a la libertad de expresión», ha dicho Bokova a través de un comunicado, recogido por el Centro de Noticias de Naciones Unidas.
La directora general de la UNESCO ha indicado que «es necesario llevar a cabo una investigación exhaustiva de estas muertes para que los periodistas puedan continuar con su trabajo sin temer por sus vidas o por las de sus parientes».
Desde 2002, al menos 11 periodistas o trabajadores de los medios de comunicación han muerto de forma violenta en Brasil. Actualmente, la UNESCO estudia los retos a los que se enfrentan los informadores en las zonas más convulsas de Río de Janeiro.