En su comparecencia, el primer ministro ha señalado que su Ejecutivo se ha visto obligado a tomar medidas que no se encontraban en su programa electoral.
Sobre el referéndum de la semana pasada, en el que una mayoría de los griegos se negaron a volver a las conversaciones con la troika según las condiciones previas, el primer ministro ha declarado que ese resultado no le daba el derecho para romper relaciones con Europa.
«No estoy dejando vendidos a los griegos. Nunca pedí el ‘no’ para salir de Europa, sino para fortalecer nuestra capacidad negociadora», ha declarado.