«El secretario (de Estado) no ha hablado con el presidente y desconoce la razón (de su cese) pero está agradecido por la oportunidad para servir y todavía cree firmemente que el servicio público es un noble oficio», aseguró Goldstein, en un comunicado difundido poco después de que Trump diese la noticia.
Según Goldstein, Tillerson «tenía la intención de seguir por los progresos clave que se habían logrado en materia de seguridad nacional», aunque el secretario adjunto también deseó suerte al nuevo responsable ministerial, Mike Pompeo, hasta ahora jefe de la CIA.
Esta nota, que ha añadido aún más controversia al cese de Tillerson, le habría costado el puesto a Goldstein, que este mismo martes ha sido cesado por contradecir la versión oficial, según un portavoz de la Casa Blanca citado por la cadena de noticias NBC.
«Ha sido un honor», ha dicho Goldstein. «No tengo nada por lo que lamentarme, más allá de que siempre intentas hacer más, y me siento orgulloso de lo que hemos logrado», ha añadido, en una breve declaración en la que también ha descrito a Tillerson como «un gran hombre».