El Ministerio de Exteriores de Rusia ha convocado al embajador de Hungría en el país, Janos Balla, y le ha entregado «una nota de protesta» antes de notificarle la expulsión de un diplomático, según ha informado la agencia rusa de noticias Sputnik.
Asimismo, ha dicho que es «una respuesta a los pasos hostiles e injustificados de Hungría, que consistieron en la expulsión de un diplomático ruso en base a acusaciones infundadas de Reino Unido por el llamado ‘caso Skripal'».
El departamento que dirige Sergei Lavrov convocó el pasado viernes a embajadores de 23 países para anunciar la expulsión de embajadores en el mismo número que estos países decidieron echar a los diplomáticos rusos. En el caso de España, declaró persona ‘non grata’ a dos miembros de la Embajada en Moscú.
En ese momento, la Cancillería rusa se reservó el derecho a responder más adelante a Bélgica, Hungría, Georgia y Montenegro, dado que se sumaron más tarde a la ola de expulsiones de agentes rusos. Cada uno de estos países echó a un emisario del Gobierno de Vladimir Putin.
CASO SKRIPAL
Skripal y su hija fueron encontrados el pasado 4 de marzo inconscientes en un banco de las calles de Salisbury. Las autoridades británicas determinaron que habían sido envenenados con un agente nervioso de la era soviética y acusaron de ello a Rusia.
El Gobierno de Theresa May expulsó a 23 diplomáticos rusos y pidió a sus aliados internacionales que siguieran sus pasos. En la última semana, 28 países, la mayoría europeos pero también Estados Unidos, han declarado persona ‘non grata’ a más de 140 agentes rusos en sus respectivos territorios.
Putin, que había anunciado una «respuesta simétrica» a la expulsión masiva de sus agentes, ha negado cualquier responsabilidad en el ataque a los Skripal y acusa a Downing Street de «mentir». Moscú ha lanzado la teoría de que el ataque químico es obra de Londres.