El pasado fin de semana los medidores de contaminación de Pekín midieron una concentración 993 microgramos de partículas en el aire, una cantidad muy por encima de los 250 microgramos de máxima que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera aceptables.
Cielo marrón, aire contaminado, problemas cardíacos y respiratorios son los efectos de estos cuatro días de altos niveles de contaminación que han desatado las críticas de las población tanto en las redes sociales como en los medios oficiales.
Según la previsión, mañana podría llover
¿Bombardeará las nubes para limpiar el aire de polución? Aunque esta práctica pueda parecer extraña se trata de una técnica bastante habitual en el gigante asiático y que se utiliza para paliar sequías, reducir la contaminación y sofocar incendios, entre otros. Además de China, también es utilizada por Israel, México, Estados Unidos e incluso la Comunidad de Madrid que incluyó en el BOE del 27 de febrero de 2012 la adjudicación de un contrato la empresa alemana Radiometer Physics está preparada para «suministrar, instalar y poner en servicio un equipo radiómetro.
¿Cómo se controla el clima?
La técnica que se utiliza es conocida con el nombre de ‘siembra de nubes’. Consiste en detectar las nubes con potencial para generar lluvia, estudiar su desplazamiento y posteriormente, a través de cohetes o bengalas inyectar yoduro de plata en las nubes. La fusión del yoduro con el agua provoca que el primer elemento ascienda a la parte superior de la nube, lo que hace que las gotas de agua se condensen, pesen más y, por efecto de la gravedad, caigan en mayor cantidad. Después de la acción, la plata se deposita en el fondo del embalse sin degradarse.
Contaminación, sequía o incendios son los principales casos
El gobierno chino cuenta con la Oficina de Modificación del Clima de Pekín, una unidad que forma parte del Buró de Meteorología de China y que tiene la capacidad de manipular el clima. Además cuenta con un Plan Quinquenal 2011- 2015 para el Desarrollo Meteorológico en el que recoge que antes de 2015 se llevarán a cabo cuatro programas regionales para incrementar artificialmente las lluvias.
China utilizó esta técnica para limpiar el aire justo antes de la celebración de los JJOO de 2008. Un año después, volvió a disparar yoduro sobre Pekín para paliar los efectos de cuatro meses de sequía. Esta nevada se prolongó durante tres días y llevaron al cierre de las principales de carretera de la ciudad.