El pasado 19 marzo se cumplieron 10 años del comienzo de la guerra en Irak y la invasión de estados Unidos. El actual presidente de Estados Unidos conmemoró esta fecha con algunas palabras dirigidas a todas las víctimas de esta guerra.
«Saludamos el coraje y la determinación» de los más de 1,5 millones de militares y civiles estadounidenses que escribieron en Irak «uno de los capítulos más extraordinarios de servicio», destacó Obama en un mensaje difundido por la Casa Blanca y suscrito también por su esposa, Michelle.
El presidente recordó, además, a los casi 4.500 soldados estadounidenses fallecidos cuyo sacrificio dio al pueblo iraquí «la oportunidad de forjar su propio futuro después de muchos años de penurias».
«Debemos asegurarnos de que los más de 30.000 estadounidenses heridos en Irak reciben la atención y los beneficios que se merecen2, afirmó el mandatario.
Fue el antecesor de Obama, el republicano George W. Bush, quien ordenó la invasión de Irak y el 20 de marzo de 2003 misiles »Tomahawk» atacaron una granja en el sur de Bagdad donde, según informaciones de inteligencia, el dictador Sadam Husein estaba reunido con responsables políticos y militares.
La misión de combate de EEUU finalizó el 31 de agosto de 2010 y las últimas tropas se retiraron de Irak el 18 de diciembre de 2011.
Desde entonces el país ha experimentado un repunte de la violencia, que había ido disminuyendo paulatinamente en los últimos años de la ocupación estadounidense.
«Las últimas de nuestras tropas salieron de Irak con la cabeza bien alta en 2011 y Estados Unidos continúa trabajando con nuestros socios iraquíes para avanzar en el interés común de paz y seguridad», enfatizó Obama en su mensaje.
Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, recordó en su rueda de prensa diaria que Obama se comprometió como candidato presidencial en 2008 a poner fin a la guerra de Irak y cumplió con lo prometido.
«La situación en Irak sigue siendo un desafío. Pero hay un Gobierno electo y una economía en crecimiento», señaló Carney.
El portavoz explicó que serán los historiadores quienes juzgarán si Irak está mejor hoy que hace diez años, pero anotó que «librar al mundo de Sadam Hussein fue un hecho positivo» y que Obama puso fin a la guerra «de una forma más responsable» al modo en que EEUU llevó a cabo la invasión.
Obama pide precaución con la situación en Siria
El presidente estadounidense, Barack Obama, quiere una «investigación definitiva» sobre la posible utilización de armas químicas por el régimen del presidente Bashar al Asad en Siria antes de tomar una decisión definitiva, declaró la Casa Blanca, mientras se producían encarnizados combates cerca a Damasco.
Estados Unidos reconoció por primera vez que el régimen sirio probablemente utilizó armas químicas pero al tiempo subrayó que sus informaciones no eran suficientes para tener la certeza de que Damasco cruzó la «línea roja» trazada por el presidente Barack Obama.
«La comunidad estadounidense del espionaje concluyó, con diferentes grados de certeza, que el régimen sirio ha utilizado armas químicas a pequeña escala en Siria, en particular sarín» En la jerga de los servicios de inteligencia estadounidenses «diferentes grados de certeza» significa que las distintas agencias no están todas de acuerdo, explicó un alto responsable del Pentágono.
Ahora, existen pequeñas evidencias de que el régimen estaría utilizándolas contras la población y Obama se enfrenta a su gran dilema, porque no quiere cometer el mismo error que con Irak, donde acusaron al país de tener armas nucleares y nunca las encontraron. Sin embargo, durante sendas campañas electorales se ha presentado como el pacificador de la región por lo que una intervención ahora, podría acarrearle problemas en el interior del país.