La ONU iniciará este miércoles una operación por tierra, mar y aire para ayudar a medio millón de desplazados por el avance militar del grupo yihadista Estado Islámico, en el norte de Irak.
«La situación es desesperada para aquellos que no cuentan con un lugar de cobijo apropiado, la gente lucha por encontrar alimentos y agua para alimentar a sus familias», dijo un portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que estará a cargo de la operación humanitaria.
El organismo señaló que también está trabajando con las autoridades de la región autónoma iraquí de Kurdistán, a donde huyeron al menos la mitad de los desplazados por la violencia y el caos en Irak.
Instan a la acción
La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) reclamó una acción urgente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para proteger a los kurdos yazidíes, que son objeto de ataques y abusos por parte del grupo Estado Islámico (ISIS en sus siglas en inglés) en Irak.
«La comunidad internacional y el Gobierno de Irak deben actuar ya para proteger a estas poblaciones de ser sometidas a más actos bárbaros»,subrayó en un comunicado Karim Lahidji, el presidente de la FIDH.
Lahidji insistió en que «se necesitan medidas inmediatas para garantizar la protección efectiva de la población civil y para que la ayuda humanitaria llegue a todas las personas desplazadas».
Así, hizo notar que se calcula que al menos 150.000 yazidíes, miembros de una minoría religiosa kurda, han huido de sus hogares tras los ataques perpetrados por EI y están acampados en las montañas de Sinyar, sin poder hacer frente a sus necesidades básicas, tales como refugio, alimentos y agua.
Ante la situación de estos refugiados, entre los que también hay miembros de otras minorías como cristianos, turcomanos y chabaquíes, y de las informaciones sobre ejecuciones de personas de la comunidad yazidí en el Sinyar y sobre el secuestro de unas 1.500 mujeres y niñas, la ONU ha señalado que estos actos pueden suponer crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y, potencialmente, genocidio.
Por eso la FIDH instó al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas a que convoque inmediatamente un período extraordinario de sesiones con vistas a adoptar una resolución que condene los abusos cometidos y pida a la comunidad internacional y al Gobierno iraquí que actúen de manera inmediata para garantizar la protección de todas las minorías religiosas amenazadas en el país. La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) reclamó una acción urgente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para proteger a los kurdos yazidíes, que son objeto de ataques y abusos por parte del grupo Estado Islámico en Irak.
«La comunidad internacional y el Gobierno de Irak deben actuar ya para proteger a estas poblaciones de ser sometidas a más actos bárbaros»,subrayó en un comunicado Karim Lahidji, el presidente de la FIDH.
Lahidji insistió en que «se necesitan medidas inmediatas para garantizar la protección efectiva de la población civil y para que la ayuda humanitaria llegue a todas las personas desplazadas».
Ofensiva sobre Tikrit
El Ejército iraquí inició este martes una amplia operación militar para recuperar la ciudad de Tikrit, al norte de Bagdad, controlada por los yihadistas del Estado Islámico, informó una fuente de seguridad iraquí.
Las fuerzas iraquíes avanzan hacia Tikrit, capital de la provincia de Saladino, desde tres frentes: la población de Al Auya, lugar de nacimiento del dictador Sadam Husein y situada 10 kilómetros al sur de la ciudad, la zona de Shagarat al Dur (al oeste) y la zona de Al Dayum (al noreste).
Las tropas iraquíes cuentan con la cobertura aérea de los helicópteros militares del Ejército, que están bombardeando las posiciones de los yihadistas.
Sin embargo, la fuente explicó que el avance de las tropas es lento por la gran cantidad de artefactos y de minas implantadas por los yihadistas en las carreteras y por el despliegue de sus francotiradores en las azoteas de los edificios.
Hoy mismo, las fuerzas mixtas iraquíes y kurdas desactivaron cuatro barriles explosivos que habían sido colocados en una de las compuertas de la presa de Mosul, en el norte de Irak, así como otros 140 artefactos en las inmediaciones del dique.
El portavoz de las Fuerzas Armadas iraquíes, el general Qasem Atta, anunció ayer que las fuerzas iraquíes y las tropas kurdas, con apoyo aéreo iraquí y estadounidense, han recuperado la presa de Mosul del EI por completo.