El enviado de la ONU para el Sáhara Occidental, el estadounidense Christopher Ross, ha presentado su dimisión tras ocho años en el puesto, dijo hoy Naciones Unidas.
Ross fue nombrado en 2009 por el anterior secretario general de la organización, Ban Ki-moon, y ha puesto su cargo a disposición del nuevo jefe de la organización, António Guterres, al haber sido incapaz de desbloquear el conflicto entre Marruecos y el Frente Polisario.
«No ha podido llevar a las partes de vuelta a las negociaciones y por ello, con la elección de un nuevo secretario general, ha ofrecido su dimisión», explicó hoy el responsable de Asuntos Políticos de la ONU, Jeffrey Feltman, preguntado durante una conferencia de prensa.
La decisión final corresponde ahora a Guterres, que asumió la jefatura de Naciones Unidas el pasado enero.
Por el momento, Ross «sigue siendo el enviado personal» del secretario general, según dijo a Efe Farhan Haq, portavoz del diplomático portugués.
Ross ha sido muy criticado durante los últimos años por Marruecos, que lo considera demasiado próximo a la tesis independentista del Frente Polisario y que en 2012 le retiró oficialmente su confianza, aunque luego dio marcha atrás.
Desde entonces, sin embargo, las relaciones han seguido siendo tensas y Rabat ha boicoteado la labor del enviado de la ONU, por ejemplo impidiéndole viajar al territorio del Sáhara bajo su control.
Pese a sus intentos, Ross no ha logrado sentar a la mesa a Marruecos y al Polisario y ha visto cómo la tensión en torno a la excolonia española aumentaba en los últimos meses, sobre todo en el área de Guerguerat, junto a la frontera con Mauritania.
El pasado 26 de febrero Marruecos anunció la retirada «unilateral» de sus tropas de esa zona, tras un llamamiento de Guterres, preocupado por un posible choque armado con fuerzas del Frente Polisario desplegadas allí.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha venido discutiendo regularmente la situación en el Sáhara Occidental en los últimos meses y deberá ocuparse del tema a fondo esta primavera, cuando está previsto el examen anual de la misión de Naciones Unidas en la zona (Minurso).
La ONU estableció en 1991 la Minurso con el fin de facilitar un referéndum sobre el futuro de la excolonia española, consulta que por ahora no se ha llevado a cabo.
Marruecos presentó una propuesta de autonomía para la zona en 2007 y considera que esa debe ser la base de la negociación, mientras que el Frente Polisario insiste en la necesidad de convocar cuanto antes ese referéndum.