El primer ministro de Francia, el socialista Manuel Valls, ha anunciado un drástico recorte en las jubilaciones, los subsidios sociales y la congelación de los salarios de los funcionarios en el marco de un plan para reducir el gasto público.
El gobierno francés se apunta a las medidas »anticrisis» para sanear su déficit, cuando España ya lleva 5 años con medidas de este calado.
Los Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy, han acometido numerosas medidas exigidas por Bruselas para sanear nuestro sistema.
Ellos han contado desde el principio con el descontento de la ciudadanía, la oposición e incluso, con miembros de su propio partido.
Por su parte, el ministro francés, Manuel Valls, también tiene a su partido en contra de las medidas anunciadas y, está por ver, si a la ciudadanía.
Aquí establecemos una comparación sobre las medidas realizadas por Rodríguez Zapatero y las que quiere aprobar el Gobierno de Hollande:
El objetivo
En Francia:
El objetivo final del gobierno francés consiste en reducir el déficit público a un 3% del Producto Interior Bruto (PIB) para 2017, dejándolo en 50.000 millones.
En España:
El objetivo de Zapatero era ahorrar 15.000 millones de aquí a 2011 para devolver el déficit al límite del 3% antes de 2013.
Las pensiones
En Francia:
«Salvo las más modestas», confirma el socialista Valls. Al igual que los subsidios sociales (seguros de desempleo, subvenciones familiares). Quedarían fuera de la medida los subsidios otorgados a los más pobres.
Con esta medida, los socialistas franceses prevén que el 1 de octubre de 2015, con los 2.000 millones de euros ahorrados con esta medida, desbloqueen las prestaciones.
En España:
Zapatero suspendió la revalorización de las pensiones para 2011, excluyendo las no contributivas y las mínimas. Los socialistas pretendían ahorrar con esta medida un total de 1.500 millones de euros, al no equiparar las prestaciones con la evolución de precios. Las proyecciones sobre la inflación, que fijó Bruselas, recuperan el aumento oficial del 2% de los precios para 2011.
Un impuesto para los ricos
En Francia:
Fue de las últimas medidas anunciadas por Valls. El ministro francés asegura que ya se encontraba en su programa de medidas de política general.
Según explica el diario Le monde, se trata de rebajar el poder adquisitivo de los asalariados «con el fin de reactivar la economía y que sea más justa», explica Valls.
En España:
Zapatero dejó la puerta abierta a nuevas medidas fiscales a lo largo de su Gobierno, entre ellas la creación de un impuesto »para ricos». La medida consistía en una mayor subida de impuestos para la rentas más altas o los impuestos al capital, de manera que cada uno contribuyese en su medida a reducir el déficit.
Finalmente, la medida no llegó a tramitarse. Zapatero tuvo en contra a la gran mayoría de los partidos políticos y no pudo conseguir los suficientes apoyos para que viera la luz.
Creación de empleo
En Francia:
Con un 10,8% de paro en Francia, Manuel Valls, quiere orientar nuevas medidas hacia la creación de empleo pero, sobre todo, «orientadas hacia el empleo de la mujer», asegura el ministro en declaraciones a Le Monde.
El ministro francés pretende establecer un diálogo para acordar con los agentes sociales la creación de nuevas medidas que frenen el desempleo.
En España:
Zapatero anunció a su llegada al gobierno que realizaría medidas contra la destrucción de empleo. La Ley de Economía Sostenible pretendió frenar las cifras altas de paro que empezaban a repuntar con la crisis.
La medida contaba con iniciativas en favor de la renovación y el cambio del modelo productivo. Para ponerla en marcha, Zapatero reclamó el acuerdo de sindicatos y empresarios y la implicación de las comunidades autónomas.
El socialista explicaba que, además de salir de la crisis y apoyar el empleo joven, el Ejecutivo mejoraría el modelo productivo para hacerlo «más competitivo, innovador y sostenible» y conseguir así un empleo «más digno y menos precario».
Finalmente, la medida no consiguió el resultado esperado. La crisis financiera arrasó millones de empleos. En la era Zapatero el paro se duplicó, de 2,2 a 5 millones.
¿Tendrá Francia movilizaciones contra las reformas?
Para Manuel Valls, sacar las medidas adelante se le complica por momentos. Algunos miembros de su propio partido ya han pedido que no se voten cuando se sometan a la Asamblea Nacional el próximo día 30 de abril.
Las medidas han tenido poca aceptación también entre los medios de comunicación y, por consiguiente, tampoco se espera mucho apoyo entre la ciudadanía. El miedo a la huelga sobrevuela el Gobierno de Hollande.
A Zapatero ya le sucedió
El 29 de septiembre de 2010, los sindicatos protestaron por la reforma laboral y las políticas de ajuste del Ejecutivo del PSOE. Hasta la fecha eran los mayores recortes sociales en la historia de la democracia. También criticaron la reforma de las pensiones aprobada por el Congreso ese mismo mes de septiembre.