Un primer bombardeo se ha cobrado la vida de ocho personas en la localidad de Al Hamadi, incluidas cinco mujeres y cuatro niños. En un segundo ataque ha sido bombardeada otra localidad del sur de Hasaka.
La región de Hasaka está bajo control de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una milicia kurdo-árabe apoyada por Estados Unidos, pero el Ejército controla un enclave dentro de la ciudad de Hasaka y varias bases militares más en la provincia.